jueves, 1 de septiembre de 2016

¿Cómo aprender magia ilusionista?

De vez en cuando alguien me escribe de alguna parte del mundo diciéndome que su hijo quiere aprender magia. Es difícil orientarle si no te avisa desde que lugar escribe o la edad del muchacho. Normalmente doy una orientación general que sirva para el mayor número de personas. La última carta en este sentido tuvo la respuesta que sigue. Por respeto a la persona evito identificarle, aprovecho para saludarle desde el otro lado del charco.

"Como bien dices en internet hay muchas cosas ¡demasiadas! Para comprender cómo funciona la magia hay que tener en cuenta que el truco no es la magia. El truco solo es un instrumento para producir la sensación de magia: hacer creer que algo que ha sucedido es imposible y por ello asombroso. Para que funcione el truco hay que convencer al público de que no hay truco. El truco por sí mismo es casi siempre difícil de ocultar, hay que recurrir a técnicas para desviar la atención del espectador hacia otro lugar ¡pero sin que se de cuenta de que ha sido desviada! Por ejemplo si tu miras a tu mano y luego miras a los ojos del espectador, él te mirará, luego puedes volver a mirar a tu mano y él la mirará.
En el instante que no miraba quizá hayas dejado caer a tu bolsillo el objeto que "desaparece", pero él comprenderá que lo hiciste desaparecer en esos dos segundos que no miró a la mano. Así que además de una desviación física de la atención, hace falta una desviación psicológica. Muestras una moneda en la mano y cierras el puño. Miras al espectador mientras le preguntas si tiene una varita mágica cosa que le distrae un instante, tomas su bolígrafo del bolsillo del pecho (suponemos que lo lleva) y a la vez dejas caer la moneda a tu bolsillo. Le dices que el bolígrafo es una buena manera de camuflar una varita; miras de nuevo tu mano. Ahora esta vacía pero él no lo sabe, todo sigue igual en apariencia, das un golpecito con el bolígrafo y muestras que la moneda ha desaparecido.
De modo que un buen juego de magia tiene una combinación exacta de truco o técnica secreta (no he dicho cómo deshacerte de la moneda en el bolsillo sin que parezca que la mano se abre o se mueve), distracción o desviación de la atención tanto física como mental y un argumento (un texto que parece improvisado en el momento pero que esta pensado para dar sentido a todas las acciones físicas que haces sin que parezcan raras o fuera de lugar).

El problema de internet es que muchos aficionados pretenden hacer tutoriales sin haber terminado de aprender y madurar. El novato no puede distinguir entre un verdadero maestro y alguien que con buena voluntad o por vanidad no hace un truco del todo bien. No conoce a fondo los detalles o tiene defectos técnicos en sus manipulaciones.

Claro que hay trucos automáticos, que salen solos, casi siempre son de índole matemática. El arte del mago consiste en esconder esa matemática. Por ejemplo, recuerda el juego de las 21 cartas. Como seguramente sabes la carta elegida queda la número once después de unas operaciones sencillas. La mayoría de los aficionados muestra esa carta, la adivina ¡sí! pero no. El público no es tonto y comprende que esas acciones sin sentido son el armazón matemático que hace parecer que adivinas la carta. El asombro es pequeñito. Es el asombro de que tú sabes algo que yo no sé. Es un puzzle, un acertijo, no es magia. Un profesional en cambio puede empezar por decir que "el juego que voy a mostrar se basa en las matemáticas, por favor haz todo lo que yo te diga para que el juego salga, si no lo haces exactamente el juego no saldrá". De este modo te garantizas que el espectador va a seguir tus intrucciones sin engañarte y con cuidado en no equivocarse. O sea, te garantizas que la carta quedará la número once. Una vez hecho todo extiendes las cartas boca abajo "para que yo no sepa cómo han quedado, pero no importa este juego es de lógica matemática". No pierdas la vista la número once. Ahora le pides que haga la mezcla esquimal. Lógicamente no sabe cómo se hace porque no existe. Entonces como para enseñarle, una mano toma un grupo de cartas y las arroja al aire. La otra mano hace lo mismo pero tomando la once con ellas y al tirarlas la ves. Unas cartas caen cara arriba y otras cara abajo. Esto desconcierta al espectador pero tu dices que los esquimales mezclan asi las cartas porque no pueden quitarse los gruesos guantes sin riesgo de congelarse los dedos. Pide al espectador que reuna todo el barullo de cartas. No importa como queden las cartas,unas boca arriba y otras al revés.
En este punto tu dices triunfal que "como dije este es un  juego matemático, o mejor dicho de lógica matemática, pues la carta elegida siempre coge olor a foca recién cazada por los esquimales" Empiezas a olfatear las cartas hasta dar con la elegida.
Poco importa si haces la historia esquimal u otra más apropiada a tus intereses o a tu público. ¡Acabo de inventármela! Lo que he querido enseñarte es que al revolver las cartas he roto la solución obvia de que se trataba de un juego matemático. Para el público es ahora cuando no tiene solución, sobre todo porque la historia esquimal saben que es absurda.

Es difícil orientarte, pues depende de la edad de tu hijo, de lo que quiera aprender, de dónde vive. Lo ideal es reunirse con otros muchachos en algún club de magia. Hay sociedades de magos por todo el mundo, pero a lo mejor tú no tienes una sociedad cerca. Así que te doy un enlace www.allmagic.com Es una página para profesionales y aficionados avanzados. Tiene algunos juegos de magia que requieren conocimientos de técnicas básicas, pero te lo doy porque encontrarás enlaces a tiendas de magia y sociedades mágicas de casi todo el mundo. Muchas tiendas de magia tienen material preparado para principiantes. En España la principal en venta por internet es www.tiendamagia.com en América la argentina bazardemagia.com Estas son tiendas de referencia y si encuentras alguna tienda más cerca de tu casa te servirán para comparar con ellas, pues hay que tener cuidado con tiendas de internet que solo buscan vender sin importarles si lo que te dan es de mala calidad o es algo que tú puedas hacer, muchas veces compramos juegos que acaban en un cajón porque no estamos preparados para hacerlos." Suerte, seguiré por aquí publicando juegos sencillos al alcance de quienes no tienen conocimientos técnicos.

Pregúntame sobre mis espectáculos: contacto@magiaevangelica.com

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