Recursos: pasando al camello por el ojo de una aguja

Leemos en Mateo 10, 25: "Le es más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios". Quizá hasta para un mago sea difícil hacer pasar a un camello por el ojo de una aguja. Así que me lo pondré un poco más fácil. Haremos pasar a un niño a través de una carta de la baraja.

Este es un juego de los más antiguos que conozco y aunque todos lo conocemos ningún profesional lo hace. Probablemente porque más que magia es un puzzle y porque no sabemos qué contar al público. Quizá el proverbio de Jesús sea oportuno. El juego viene descrito en el libro más antiguo de magia escrito en español. Al que suele llamarse por el nombre de su autor "El Minguet", pues su título es demasiado largo "Engaños a ojos vistas y diversión de trabajos mundanos que..." y sigue una línea más. Publicado en 1733, ya en el mismo siglo XVIII fue pirateado, plagiado. Hubo varias ediciones en el siglo XIX con diversos añadidos y tambiénse ha editado en el siglo XX. Desde 1986 circula una edición reimpresa varias veces. O sea es el libro de magia más editado y vendido en España.

Bien, en este libro aprendemos como atravesar un naipe fácilmente. Puede hacerlo un niño, con cuidado una persona adulta, pero quizá baste con pasar la cabeza a través del naipe. Se hace así:

En realidad es muy fácil. Debes de tener preparado un naipe con unos cortes. Te recomiendo usar una carta de plástico en vez de cartulina. Es menos frágil. Una vez hechos los cortes guarda el naipe entre otros dos para que no se enrede en sí mismo. Para atravesarlo solamente hay que estirarlo haciendo una circunferencia y pasar con cuidado de no rasgarlo. Cuantos más cortes más hueco se hace pero también más débil es la carta y más precisos han de ser los cortes. Esta ilustración es la que mejor he encontrado mostrando las líneas por donde hay que cortar:

No sé si mi reflexión sobre el proverbio que cita Jesús, te parecerá adecuada o útil, pero es la siguiente. Todo empieza con un hombre joven y rico, creyente virtuoso pues se acerca a Jesús a preguntarle qué debe de hacer para alcanzar la vida eterna. Jesús desvía la respuesta de sí mismo a la Alianza con Moisés: debe cumplir los mandamientos. El hombre contesta que ya lo hace y Jesús le habla de desprenderse de lo que tiene. El hombre se va triste. Hasta aquí la conversación entre ambos. Pienso que si se trata de un hombre joven su riqueza le ha venido dada por herencia. Es posible que Jesús se refiera al desprendimiento en el sentido de no guardarse para sí lo que se recibe de otros, sino compartirlo, se trate de bienes materiales o espirituales. Y creo que éste es el sentido de todo el pasaje, ya que el hombre se marcha pero la conversación sigue sin él. Jesús ya no se dirige a él, sino que en realidad habla para sus discípulos. Son ellos quienes escuchan el proverbio del camello y la aguja. Son ellos los que parecen no comprender, no el hombre joven que ya se ha ido porque probablemente ha comprendido. Y Pedro le recuerda a Jesús que ellos ya han dejado todo por seguirle. Jesús promete la vida eterna a todo aquel que le siga por causa del evangelio. Creo que este pasaje es como un adelanto a los discípulos del apostolado al que se dedicarán y la exigencia y sacrificio personal que exigirá la misión. Un camino sin retorno.
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